Logotipo de My EKG

Signos de Isquemia, Lesión y Necrosis en la Cardiopatía Isquémica


Isquemia, Lesión, Necrosis en la Cardiopatía isquémica

Imagen cortesía de khunaspix / FreeDigitalPhotos.net

La isquemia, la lesión y la necrosis miocárdica son los distintos grados de daño que sufre el miocardio ante un desbalance entre el oxígeno aportado por las arterias coronarias y el consumo del músculo cardiaco.

El tiempo que dura la injuria es el factor determinante de la aparición de la isquemia y su progresión a lesión o a necrosis.

Tanto la isquemia como la lesión y la necrosis tienen distintas manifestaciones en el electrocardiograma, permitiendo su identificación.


Diferencias entre isquemia, lesión y necrosis

Clásicamente se han diferenciado tres fases después de la oclusión de una arteria coronaria:

  • Isquemia: reducción del aporte de oxígeno al miocardio menor de 20 minutos. El daño es reversible. En el electrocardiograma se muestra principalmente como alteraciones de la onda T.
  • Lesión: persistencia en el tiempo del déficit de oxígeno (mayor de 20 min). El daño es aún reversible en gran parte. La principal alteración en el electrocardiograma son los cambios del segmento ST.
  • Necrosis: persistencia durante más de 2 horas del déficit de oxígeno. Es irreversible. Se caracteriza en el EKG por la aparición de ondas Q patológicas.

Causas de desbalance entre aporte y consumo de oxígeno:

La isquemia miocárdica puede estar provocada por un déficit en el aporte de oxígeno, como en el síndrome coronario agudo, el espasmo coronario o la anemia; o causado por un aumento del consumo miocárdico, como en las taquicardias o las infecciones.

Isquemia miocárdica

Tras la oclusión de una arteria coronaria se produce un retraso en la repolarización de las células miocárdicas, provocando alteraciones en la onda T 1.

Isquemia subendocárdica

El subendocardio es la región más sensible a la isquemia, por lo que es la primera en sufrir el déficit de oxígeno.

El retraso en la repolarización, al inicio de la isquemia en el subendocardio, provoca ondas T picudas, más altas de lo normal, acompañadas de un aumento del intervalo QTc.

Esta imagen de ondas T picuda se observa al inicio de un infarto agudo con elevación del ST (IAMCEST). Pese a que el daño en el IAMCEST es por concepto transmural, la primera región en sufrir isquemia es el subendocardio y por tanto las ondas T picudas son el primer cambio del electrocardiograma en el IAMCEST.

Isquemia subepicárdica o transmural

La isquemia subepicárdica (en la práctica es transmural) provoca un retraso en la repolarización de todo el miocardio de la región afectada, generando en el EKG una onda T aplanada o negativa 1.

Estas alteraciones de la onda T se observan en el IAMCEST antes de que se desarrolle la onda Q.

Lesión miocárdica

De persistir la isquemia se producen los cambios clásicos de la lesión miocárdica, que en el electrocardiograma se observa como una elevación o descenso del segmento ST.

Tipos de Síndromes Coronarios Agudos
  • 1. Oclusión parcial de una arteria coronaria.
  • 2. Oclusión completa de una arteria coronaria.

Imagen de lesión subendocárdica

La lesión subendocárdica suele estar provocada por una oclusión parcial de una arteria coronaria, generando un mayor grado de lesión en el subendocardio (más sensible a la isquemia) que en el subepicardio.

Esto provoca en el electrocardiograma una imagen de descenso del segmento ST en más de una derivación cardiaca. El descenso del ST es un signo de isquemia activa y se suele observar en los síndromes coronarios agudos sin elevación del ST (SCASEST).

Imagen de lesión subepicárdica

En caso de oclusión total de una arteria coronaria, se produce una lesión transmural (clásicamente llamada subepicárdica), provocando que todo el miocardio de la zona esté afectado.

En estos casos se observa la imagen de lesión subepicárdica (transmural), una elevación del segmento ST en las derivaciones cercanas a las regiones afectadas 2 3.

Recuerda: la elevación del segmento ST es signo de infarto agudo y se ha de corregir lo antes posible (fibrinolisis o angioplastia). Ver infarto agudo con elevación del ST.


Necrosis miocárdica

La necrosis se produce por la persistencia en el tiempo de la isquemia miocárdica. Normalmente se observa en la evolución del infarto agudo con elevación del ST sin revascularización, ocasionando la muerte (necrosis) del tejido miocárdico.

La región cardiaca con necrosis es eléctricamente inactiva, observándose en el electrocardiograma ondas Q patológicas o complejos QS en las derivaciones cercanas a ella.

Cuando hablamos de onda Q y necrosis nos referimos a un daño sobre todo subepicárdico (transmural), pues normalmente los eventos isquémicos limitados al subendocardio no provocan onda Q (infarto no Q o SCASEST).


Resumen

La isquemia, la lesión y la necrosis miocárdica, son los distintos grados de daño que sufre el músculo cardiaco tras un síndrome coronario agudo.

Cada alteración presenta cambios específicos en el electrocardiograma, permitiéndonos realizar su diagnóstico de forma rápida.

Durante las fases de isquemia y de lesión, el daño miocárdico es potencialmente reversible, no así en la fase de necrosis.

Esperamos haberte servido de ayuda con este artículo, si te deseas continuar en la misma sección quizás te interesen los artículos síndrome coronario agudo, infarto con elevación del ST o localización de la arteria ocluida con el EKG.

Referencias

Si te ha gustado... Compártelo.